Texto Bíblico do Dia, explicação e Encorajamento - Tesalonicenses
1 Tesalonicenses 1:2-3
¿Qué tal ser incluido en la oración del apóstol Pablo? ¿Qué tal ser recordado como una persona que tiene fe emocionante, un amor que no es solo palabras, o como alguien que, a pesar de las circunstancias, mantiene una firme esperanza en Cristo Jesús?
Pablo destaca este texto recordando a los Tesalonicenses, de la alegría y el orgullo que sintió cuando vio a sus hijos espirituales revelar sus enseñanzas, revelando a Cristo en el camino de vivir y hablar.
¿Cómo somos recordados por otros? ¿la gente nos recuerda con alegría?, como alguien que tiene un corazón sensible y ferviente, como alguien que sirve a otros sin medir esfuerzos, o somos recordados por ser falciles en la fe y espiritualmente indiferentes?
¡Piense en ello!
1 Tesalonicenses 4:18
Últimamente nuestra atención se ha centrado en el caos en la salud pública. Nuestras mentes son bombardeadas cada día con información que nos ha dejado más inseguros y sin esperanza. Sumen a eso los problemas ya comunes que implican la política, la corrupción, la inseguridad, las finanzas, la familia y tantas otras cosas que solo contribuyen a una situación de desesperación, desaliento, incredulidad y enfriamiento espiritual. En este texto, el apóstol Pablo sugiere que nos consuelamos mutuamente. Y este consuelo se basa en un acontecimiento que se acerca, el Éxtasis de la Iglesia y la Gran Tribulación, y que no puede ser olvidado o tratado con indiferencia por cada uno de nosotros. Se refiere a la primera venida del Señor. Jesús viene a una hora que no esperas, así que debemos estar listos para su repentina venida.
Hermanos y hermanas, no podemos quitar los ojos de los signos y lo que está a punto de suceder, este hecho debería hacernos tan felices que todas las demás cosas perderán su efecto en nuestras vidas.
Aconsejo que quitemos los ojos de la televisión, de Internet y nos fortalezcamos en la Palabra de Dios.
Mas nosotros, que somos hijos del día, estemos sobrios, vestidos de cota de fe y de caridad, y la esperanza de la salud por yelmo 1 Tesalonicenses 5:8.
La obediencia abre las riquezas de la experiencia con Cristo.
La oración motiva y alimenta la obediencia, colocando al corazón en la mentalidad apropiada para desear obediencia.
El Espíritu Santo enseña, inspira e ilumina la palabra de Dios en nosotros.
Uno puede orar y no ser cristiano, pero no puede ser cristiano y no orar.
Romanos 8:15 nos dice que la adopción espiritual que nos hace hijos de Dios nos lleva a clamar en expresiones verbales: "Padre Abba".
La oración es para el cristiano lo que la respiración es para la vida.
La oración es el secreto de la santidad, si la santidad tiene de hecho algún secreto.
El abandono de la oración es una de las principales causas del estancamiento en la vida cristiana.
En 1 Tesalonicenses 5:17 Dios nos dice que oremos sin cesar.
Esto significa que debemos vivir en un estado continuo de comunión con nuestro Padre.
La oración es lealtad a Dios. No orar es rechazar a Cristo y abandonar el cielo. "La vida de oración es la única que cuenta en el Cielo" (E. M. BOUNDS)