Texto Bíblico del Día, explicación y aliento - Hebreos

Somos santificados por Él y así hechos a Su semejanza y llevados a una maravillosa unidad y comunión basada en la semejanza moral.
PORQUE EL QUE SANTIFICA Y LOS QUE SON SANTIFICADOS SON TODOS UNO. Tenemos un solo Padre. Jesús, el Dios-hombre, a través de la encarnación, ahora comparte con el hombre la paternidad de Dios como Creador; Al santificar a sus discípulos, les hace partícipes de la santidad del Padre, estableciéndose así un aire de familia. Esta semejanza con Dios a través de la santificación es el significado más profundo de la filiación en el Nuevo Testamento.
Por esta semejanza con Dios a través de la santificación, Él (Jesús) no se avergüenza de llamarlos hermanos.
Para probarlo, el autor cita el Salmo 22:22 y toma dos breves frases de Isaías 8:17-18. Luego sigue la conclusión: Por cuanto los hijos y los hermanos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo (verso 14).
La palabra PARTICIPAR es clara y fuerte, significando que los hermanos son mutuos participantes y compañeros en el sufrimiento de su situación humana; Sería entonces inconcebible que su Príncipe fuera una criatura sobrehumana y distante, separada de la estructura humana y no involucrada en la agonía de la vida.

EL PROPÓSITO DE LA MUERTE DE CRISTO. El Logos se hizo hombre para poder morir; Murió para poder aniquilar AQUELLO QUE TENÍA EL IMPERIO DE LA MUERTE, ES DECIR, EL DIABLO. Fue a través de su muerte que Jesús pudo destruir al diablo. Su muerte no fue casual, sino indispensable y dinámica.
Pero ¿en qué sentido Satanás tenía el Imperio de la muerte? Es difícil determinar hasta qué punto Satanás tenía poder sobre la muerte. Esto debe haber incluido la muerte del hombre, y está claro que este poder tiene un final terrible e ineludible aparte de la muerte conquistadora de Cristo. La cuidadosa identificación de esta persona como diabolos, el acusador, puede sugerir que como fiscal tenía el derecho legal de exigir la muerte como castigo por el pecado del hombre. Debemos recordar que Dios y Satanás son gobernantes opuestos en la lucha por la vida y la muerte, y que el pecado del hombre le dio a Satanás una ventaja real.
Cristo murió no sólo para que el diablo fuera destruido, sino para que nosotros fuéramos liberados del temor a la muerte, éramos esclavos del temor. Se trata de una forma deplorable de esclavitud, de un miedo terrible a la muerte que encadena a todo el género humano. La esclavitud se rompe con la liberación del miedo.
Por eso, tú que ya tienes a Jesús en su vida, no debes tener miedo de morir. Y vosotros que no tenéis a Jesucristo como vuestro Señor y Salvador, acéptadlo pronto, porque Él es el único que os puede dar vida eterna de paz.

Jesús sufrió, como hombre, todas las vicisitudes de la vida. No sólo sufrió la terrible experiencia de la muerte, sino también la lucha de un ser moral. Se enfrentó a la tentación y sus feroces luchas, así como a los reveses de la vida y al dolor de la muerte. Luchó en la arena moral de la humanidad. Y sus batallas no eran falsas. ¿Cómo podría Jesús compartir los sentimientos de los seres humanos si no hubiera pasado por las mismas cosas que ellos pasaron? Pero como lo entiendo habiendo pasado por la experiencia. Él puede ayudar y asistir a quienes claman por ayuda. Mateo 15:25 - La mujer se acercó y se arrodilló ante él, diciendo: "¡Señor, socórreme!"

Durante Su vida terrena, Jesús fue fiel a quien lo designó. Sin embargo, pasó por algunos años de silencio. Después de su nacimiento y presentación en el templo no volvemos a saber de Él hasta la edad de 12 años, cuando fue encontrado debatiendo con los maestros en el templo. Lo único que se nos dice de estos años de silencio es que "Y el niño crecía, y era confortado del Espíritu, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él" (Lucas 2:40).

Jesús pasó 30 años preparándose para un ministerio de 3 años, un tiempo durante el cual fue fiel y obediente a sus padres terrenales y también a su Padre Celestial.

La sociedad instantánea en la que vivimos hoy está destruyendo a la gente. Porque todo es tan instantáneo y tan fácil, pensamos que todo lo que viene de Dios debe ser instantáneo y fácil también. Pero la fuerza, la sabiduría, el conocimiento de Dios, la madurez espiritual y el carácter piadoso se desarrollan en nosotros a medida que pasamos por pruebas y continuamos haciendo lo que sabemos que es correcto ante nuestros/Sus ojos. Si queremos crecer en Dios y hacer lo que Él nos ha llamado a hacer, debemos permanecer firmes y ser fieles.

Quiero llamar su atención sobre la palabra “si” en Hebreos 3:6 porque a menudo no nos gusta prestar atención a los “si” y “pero” en la Biblia. En pasajes como éste, vemos lo que Dios hará si hacemos lo que debemos hacer.

Ir al altar y decir la oración de confesión es sólo el comienzo de nuestro caminar con Él; Necesitamos seguir adelante y continuar en la fe. ¡Necesitamos creer en Él!

Las dos cosas que pueden interrumpir la fe son:
1- La manifestación de lo que se cree.
2- La manifestación de la duda y la incredulidad.
Nuestra fe debe continuar aun cuando parezca que todo y todos están en contra nuestra. En Cristo podemos permanecer firmes en nuestro interior porque sabemos que nuestra verdadera vida está dentro de nosotros, no en las personas o circunstancias externas.

Cuando escuchamos algo de Dios, podemos elegir responder con humildad y confianza o endurecer nuestros corazones e ignorarlo. Lamentablemente, cuando las personas no obtienen lo que quieren o cuando pasan por pruebas y dificultades, muchas de ellas optan por endurecer sus corazones.

Esto fue lo que les sucedió a los israelitas cuando hicieron su viaje por el desierto (Hebreos 3:7,8). Dios los guió a través del desierto para demostrarles que les haría el bien y que ahora podían confiar en él. Él tenía grandes planes para ellos, pero primero los probó para ver si realmente creerían en Él.

Por eso Él dice que no endurezcamos nuestros corazones como lo hicieron los israelitas. Él tiene grandes cosas planeadas para ti también, así que mantén tu corazón tierno y sensible delante de Él.

Aconséjense unos a otros cada día, mientras todavía es "hoy", para que ninguno de ustedes sea engañado por el pecado y se endurezca.

Una forma de prevenir este tipo de situación (es decir, un corazón endurecido) sería EXHORTARNOS UNOS A OTROS CADA DÍA. La mejor defensa es el ataque, y la mejor manera de preservar nuestra propia alma es estar alerta a la batalla espiritual de los demás. Un fuerte sentido de responsabilidad grupal es el sello de una iglesia saludable. Los cristianos son como las brasas: juntos alimentan mutuamente el fuego y generan un gran calor; separados, pronto se enfrían y se apagan. pero esto no se refiere a meras reuniones sociales para comer y divertirse. Debería haber un tono profundo de devoción y preocupación mutua que impregnara cada reunión de cristianos, incluso las llamadas reuniones sociales. Cuando los cristianos se unen, pueden fortalecerse unos a otros. Deberían preocuparse de que en cada momento de comunión se incluya algo que fomente el celo espiritual y el propósito santo.

Nos encontramos nuevamente con el gigante SE, esta vez con mayor énfasis y palabras más fuertes. Es decir, SE DE HECHO O ABSOLUTAMENTE mantenemos nuestra confianza.
- SEREMOS PARTICIPANTES DE CRISTO - Llegar a ser significa un estado presente basado en una acción pasada pero sostenida. Nuestro estado de salvación se funda en nuestra acción pasada, se sostiene en el presente sólo si nuestra confianza se mantiene clara hasta el final de la vida cristiana. En el principio la salvación era ferviente, comprometida y clara. Si esto no se mantiene, nuestra participación en Cristo tampoco se sostendrá.
Apocalipsis 2:4-5 dice: "Pero tengo contra ti que has dejado tu primer amor, la caridad. Por lo cual ten memoria de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras".
No dejes que tu amor por Jesús muera o se enfríe. Lo máximo que Dios podía hacer por nosotros ya lo hizo, envió a Jesús a morir por nuestros pecados, pagó todo por nuestra salvación. En este momento el costo para nosotros es gratuito, solo debemos creer en Él y aceptar a Jesús como Señor y Salvador de nuestras vidas. Dios cumple su parte, nos basta con que nosotros cumplamos también la nuestra.

- En el vero 15 el autor habla nuevamente sobre el endurecimiento del corazón. HOY, SI ESCUCHAS SU VOZ, NO ENDUREZCAS TU CORAZÓN. Cada vez que Dios habla, en cualquier momento de nuestra vida cristiana, está presente el peligro de endurecer nuestro corazón cerrando nuestros oídos. En cada uno de estos momentos hay que tomar una decisión: o entregamos nuestro corazón a Cristo o nos endurecemos.

- El pueblo de Dios, en el desierto, empezó bien, pero no terminó bien. ES POSIBLE SER BENEFICIARIO DE LA GRACIA DE DIOS Y RECEPTOR DE SU PROMESA, PERO AL FINAL SER COMPLETAMENTE RECHAZADO. Los mismos principios de equidad divina que estaban en vigor entonces se aplican a nosotros hoy.

Este capítulo podría titularse: ENTRAR EN SU DESCANSO. Este es el tema central del capítulo 4. El término “descanso” aparece nueve veces en estos dieciséis versos, ocho veces como katapausis y una como sabbatismos. La primera palabra denota una paz establecida o un estado de descanso; y la segunda, que se encuentra sólo aquí en el NT, significa "descanso sabático".

- Hebreos 4:3 nos enseña que aquellos que no escucharon la Palabra de Dios ni obedecieron sus instrucciones no entraron al lugar de descanso que Él ofrecía. Así que cuando se sientas frustrado o angustiado, o si pierdes su paz y alegría, pregúntate: ¿Estoy creyendo en la Palabra de Dios?

- La única manera en que seremos libres de luchar es creer en la Palabra y obedecer todo lo que Jesús pone en nuestros corazones para hacer. Creer en la Palabra de Dios nos libera de la necesidad de luchar para que podamos descansar en las promesas de Dios.

- ¿Necesitas el descanso de Dios? Aférrate a Él, confía y depende de Él, y experimenta el descanso que Él ha preparado para usted.

No es suficiente escuchar el Evangelio, ¡también debes creer en ello!

Puedes vivir en las bendiciones de Dios! Bendito el Dios y Padre del Señor nuestro Jesucristo, el cual nos bendijo con toda bendición espiritual en bienes celestiales en Cristo (Ef 1.3). ¡Dios ya ha hecho todo lo que necesitaba hacer por el hombre!

Pero entramos en el Reposo los que hemos creído (Heb 4: 3).
Él HA HECHO TODO LO QUE ES PARA TU SALVACION, SALUD, PROSPERIDAD, etc.
Él quiere que disfrutes de todo lo que te pertenece en Cristo.

Que según su grande misericordia nos ha engendrado de nuevo en esperanza viva, por la resurrección de Jesús el Cristo (1 Pedro 1:3).

¡Recuerde si! ¡Porque nosotros, los que hemos creído, somos los que entramos en el resto! ¡LE HAN TRAÍDO A LA TIERRA PROMETIDA, A LA TIERRA DE BENDICIONES!

Volviendo un poco al versículo anterior donde dice que la palabra de Dios es como una espada de dos filos capaz de separar COYUNTURAS Y TUÉTANOS, una sugerencia figurativa, indicando que la palabra del evangelio es capaz de llegar tan profundo, no solo a nivel de personalidad, SINO A NIVEL DE NUESTRO YO INVISIBLE. Es en los tuétanos donde se alojan las enfermedades de la sangre mucho antes de que el mecanismo del organismo se vea visiblemente afectado. La gente camina erguida, pero sus huesos pueden estar enfermos por dentro. Y en esta autorrevelación, el evangelio discierne LOS PENSAMIENTOS Y LAS INTENCIONES DEL CORAZÓN. Separamos las palabras y los hechos de una persona: el evangelio es como un discernidor (un juez), examina sus motivos e imaginaciones secretas y pronuncia sentencia.
En realidad, NO HAY COSA CREADA OCULTA ANTE DEUS; Todas las cosas están desnudas y abiertas ante los ojos de aquel con quien tenemos que dar cuenta. Éste es el poder de la luz penetrante e ineludible de la Palabra de Dios.

Literalmente, Jesús puede sentir nuestras debilidades. La palabra "flaquezas" aquí no es sólo una limitación humana, sino una debilidad consciente e inestable en la tentación.
- MAS TENTADO EN TODO - Él sabe por experiencia lo que significa para nosotros ser tentados. No fue tentado en cada situación particular ni en cada posible; Él no fue tentado como esposo, ni como padre, ni como propietario, ni como empleador, ni como soldado, porque no sirvió en ninguno de estos roles. Pero fue tentado en tres áreas básicas de la susceptibilidad humana: cuerpo, alma y espíritu. Jesús conoció la tentación en el ámbito del apetito corporal, en el ámbito de las relaciones humanas y en el ámbito de las relaciones espirituales.
Yo – nos – Dios: Fue tentado en estos tres puntos. ¿Qué debería gobernarlo? ¿Tienes antojo de pan? ¿Su deseo de aceptación? ¿Su deseo de poder? ¿O su lealtad a Dios? Éstas son preguntas fundamentales de la vida que toda persona debe responder.

- PERO SIN PECADO - Si bien es cierto que Jesús no enfrentó la tentación con la desventaja del pecado original, esa no es la idea aquí. El punto clave aquí es que Jesús nunca cedió a la tentación. Estaba perfectamente triunfante. Si Él no hubiera sido tentado como nosotros, no podría comprender nuestros sentimientos en nuestras muchas tentaciones; y, por otro lado, si no hubiera sido perfectamente victorioso, no podría ayudarnos, sino que habría necesitado ayuda Él mismo. Así que no debemos permitir que el pensamiento de volver atrás ocupe nuestra mente, ni debemos avergonzarnos ni ceder a la parálisis de la desesperación. NECESITAMOS VENIR CON CONFIANZA AL TRONO DE LA GRACIA.

Jesús es el gran Sumo Sacerdote, ya que no es un ser angelical ni está en posición de igualdad con Moisés. Él es el Hijo de Dios, Aquel que se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas (1,3), o como se expresa aquí: EL QUE PENETRÓ LOS CIELOS (14). El Trono de la gracia al que estamos invitados a acercarnos CONFIANZA en oración es el trono no sólo de Dios Padre, sino de Dios Hijo; no sólo de Aquel cuya palabra es ley, sino de Aquel que se hizo Mediador e Intercesor. El Jesús de la historia reciente y el Yahvé del Antiguo Testamento se funden en un solo Dios en un solo trono. Allí, en el trono, nuestros pecados son condenados y perdonados. Allí encontramos justicia y misericordia. Allí encontramos un acceso renovado al resto del pueblo de Dios. Pero todo esto está mediado por Jesús. Nuestra audacia sólo ocurre en él y a través de él. Si Jesús no es el Hijo de Dios, que está a la derecha del Padre, habiendo cumplido plenamente y así sustituido el orden mosaico, nuestra osadía no es más que una arrogancia insensata. Es el Padre, a través de Jesús, o es descanso a través de Jesús, o no es nada.

La función del sumo sacerdote es clara:
ES UN HOMBRE ESCOGIDO PARA REPRESENTAR A OTRAS PERSONAS EN LAS COSAS CONCERNIENTES A DIOS.
El propósito principal de esta ordenación es que uno esté calificado para ofrecer oficialmente dones y sacrificios por (en nombre de) los pecados. El pecado es lo que separa a las personas de Dios y hace necesaria una especie de mediación sacerdotal.

Para estar debidamente calificado para este oficio, el sumo sacerdote debe mostrar un carácter tan personal que pueda simpatizar con los ignorantes y los descarriados. El sacerdote no debe ser severo e impaciente, ni indiferente o desinteresado. Debe haber una preocupación moral profunda y atenta combinada con una simpatía comprensible. La justicia de esta moderación en el juicio sacerdotal reside en el hecho obvio de que ÉL MISMO ESTÁ RODEADO DE DEBILIDAD. Y así debe ofrecer ofrendas por los pecados del pueblo y también por los suyos propios.

UN SUMO SACERDOTE PERFECTO - Es comprensible que los cristianos hebreos se sintieran inicialmente atraídos por el papel mesiánico de Jesús como profeta y rey. Era el hijo de David, cuyo regreso a la tierra con poder era esperado en todo momento. Su vida y su muerte terrenas no fueron un fracaso, sino que cumplieron exactamente su función predestinada. Al comprender la naturaleza sacerdotal del ministerio de Cristo, también llegaron a ver la naturaleza esencialmente espiritual de la salvación. Jesús vino, no para expulsar al ejército romano ocupante, sino para “quitar el pecado mediante el sacrificio de sí Mismo”. Esta es la gran necesidad que debe satisfacerse antes que cualquier otra. Por lo tanto, la exposición de Jesús como Sumo Sacerdote no es opcional; Es imperativo.

CRISTO NO SE TOMÓ PARA SÍ EL HONOR DE SER SUMO SACERDOTE
- En lo único que importaba, el sacerdocio de Cristo era tan válido como el de Aarón: también era verdaderamente un nombramiento divino. Fue designado y glorificado por Aquel que le dijo: Tú eres mi Hijo: Yo te he engendrado hoy.
Pero la filiación no significa necesariamente sacerdocio. Luego se presenta otro texto: TÚ ERES SACERDOTE PARA SIEMPRE, SEGÚN EL ORDEN DE MELQUISEDEC (v. 6).
Así pues, el mismo Dios que en las Escrituras, mediante el Espíritu Santo, confirmó al Mesías como Hijo, proclamó también su sacerdocio.

Este verso habla de la idea predominante de la importancia del sufrimiento que tuvo nuestro Señor para calificarlo como el autor de nuestra salvación.

MIENTRAS JESÚS ESTABA EN LA TIERRA- Cuando en su humanidad sintió debilidad y dependencia de manera muy real, como lo evidencia su vida habitual de oración. Y este hábito de oración alcanzó su clímax durante la lucha en el huerto de Getsemaní, cuando ofreció oraciones y súplicas.

AL QUE LE PODÍA LIBRAR DE LA MUERTE - ¿Cuál era esta muerte de la cual Jesús buscaba liberación con tanta angustia? Es más probable que su alma se haya encogido ante los aspectos de esa muerte, su identificación con el pecado y la soledad, cuando el Padre ocultó Su rostro. En un sentido profundamente misterioso, Jesús debe haber sufrido angustia de alma, una de las razones siendo que Él, que nunca había conocido el pecado, ahora se estaba haciendo pecado en nuestro lugar; habría sido muy difícil para Su santa alma afrontar tal dificultad con ecuanimidad.
El verso 9 dice: Por esto llegó a ser apto para ser un sumo sacerdote perfecto y llegó a ser la fuente de eterna salvación para todos los que le obedecen. CRISTO SE CONVIRTIÓ (LITERALMENTE) PARA TODOS AQUELLOS QUE LE OBEDECEMOS, EN EL AUTOR ETERNO DE LA SALVACIÓN. Para aquellos que dejan de creer o se vuelven desobedientes, Cristo se convierte, en la cruz, no en Salvador, sino en Juez.
- No hay otro nombre, ninguna otra persona a quien tú y yo debamos orar. Jesús es el único Sumo Sacerdote que puede escucharnos y darnos la verdadera salvación.

El autor tiene mucho que decir en este punto sobre este personaje poco conocido del Antiguo Testamento, Melquisedec, porque es una figura clave para entender el Sumo Sacerdocio de Cristo. Sin embargo, son difíciles de interpretar, difíciles de explicar, porque estos cristianos son negligentes al escuchar. Se están volviendo perezosos en su apetito y comprensión espiritual; Se han vuelto perezosos y su estado actual es el resultado de algún fracaso en el pasado. Y, desgraciadamente, muchos de nosotros (cristianos) hoy somos así. Somos perezosos para estudiar la Biblia en profundidad, y cuando nos enfrentamos a otras doctrinas, ya sea de otras religiones o enseñanzas erróneas sobre temas Bíblicos, no sabemos qué responder, o aceptamos la doctrina equivocada!
En el verso 12 el autor los avergüenza cuando dice: PORQUE DEBIENDO SER YA MAESTROS DE OTROS, SI MIRAMOS EL TIEMPO, TENÉIS NECESIDAD DE VOLVER A SER ENSEÑADOS. Muchos probablemente se consideraban maestros, pero no estaban capacitados para enseñar; necesitaban actualizarse en el ABC del Evangelio, los primeros rudimentos de la Palabra de Dios. Ellos, como muchos de nosotros, han regresado a un estado infantil de fe, en lugar de convertirse en personas maduras, hasta el punto de necesitar leche y no alimento sólido. Este estado vergonzoso no se debe a falta de tiempo, porque no eran recién convertidos, sino a falta de interés, de hambre por la palabra de Dios.
- Estos días he visto el (triste) ejemplo de un hombre, hijo de pastor, nacido y criado en el Evangelio, su familia era toda cristiana, pero desgraciadamente no aprendió nada. Comenzó una relación con una mujer musulmana, inicialmente esta relación ni siquiera debería existir. Pero para poder casarse, ella exigió que él se convirtiera al Islam. Su respuesta fue vergonzosa, no quería decepcionar a sus padres. En ningún momento discutió con la Palabra de Dios, sobre Jesús, sobre lo que él creía, ¡nada! Y finalmente, se convirtió al Islam. Una creencia que ni siquiera existía en el tiempo de Jesús, sin salvación y que termina en muerte eterna.
- La Biblia no es para decorar su sala de estar. Debe ser leído y estudiado. Para que usted y yo podamos dar respuestas sobre la fe en la que creemos. Para que no seamos enanos en la fe.
- Heb 6:1 - Por lo cual, dejando ya la palabra del comienzo en la institución del Cristo, vamos adelante a la perfección ...

La actitud de escuchar perezosamente, no estudiar la Palabra de Dios, no hay vida de oración resulta en una falta de crecimiento espiritual.

El creyente activo acepta el beneficio del sacrificio de Jesús y entra en la presencia de Dios con confianza.

Faith cree en la Biblia sin duda, sabiendo que es la autoexpresión viviente de Dios.

1. Reconocer que Jesús destruyó el miedo a la muerte al derrotar al diablo Heb 2:14.18.
2. Se obstinado cuando se mantenga en las promesas de Dios. Busca fervientemente a Dios, estudia su palabra y construye tu fe.
3. ¡Espere! Desarrollar una sensación de un gran destino.
4. Para seguir a Jesús, necesitamos mucha confianza, audacia, perseverancia y declarar la palabra.

Retengamos firme la profesión de nuestra esperanza, que fiel es el que prometió Heb 10:23.

El escritor de esta carta muestra hasta dónde pueden llegar ciertos creyentes en la fe cristiana, y después de hacerlo, apostatan de la fe y así perecen para siempre.

- Es posible que hayan sido RECIBIERON LA LUZ, hayan obtenido un conocimiento primordial y una iluminación común, de la cual la gente puede tener una gran porción y aún así quedarse lejos del Cielo. A Balaam se le abrieron los ojos (Núm 24:3), y aun con los ojos abiertos descendió la más terrible oscuridad.
- Pueden haber GUSTARON AQUEL DON CELESTIAL. Es posible que hayan sentido algo de la eficacia del Espíritu Santo trabajando en sus almas, guiándolos a probar algo de la fe cristiana, y sin embargo ser como la gente en el mercado que prueba lo que no puede permitirse, prueba y luego deja la comida. Las personas pueden saborear el cristianismo, e incluso gustar de sus enseñanzas, si se les presenta en condiciones más fáciles que la de negarse a sí mismos, tomar su cruz y seguir a Cristo.
- Pueden haber CONVERTIDO EN PARTICIPES DEL ESPÍRITU SANTO, es decir, de sus dones y milagros extraordinarios, pueden haber echado fuera demonios en el nombre de Cristo y realizado muchos otros actos poderosos.
- Quizás hayan probado LA BUENA PALABRA DE DIOS; Tal vez tenían gusto por la doctrina del evangelio, tal vez oyeron la palabra con agrado, y sin embargo, nunca fueron moldeados por ella, ni le permitieron morar ricamente en sus corazones.
- Quizás tenían fuertes impresiones del cielo y estaban aterrorizados de ir al infierno. Los hipócritas pueden llegar tan lejos y luego apostatar. Estas cosas se dicen de aquellos que apostataron, pero aquí no se dice de ellos que fueron verdaderamente convertidos, o que habían sido justificados.
- El Apóstol escribe sobre la terrible situación de quienes se desvían después de haber llegado tan lejos en la fe: "Crucificaron de nuevo al Hijo de Dios y lo expusieron a la vergüenza pública. De este modo derraman desprecio sobre el Hijo de Dios". Es imposible renovarlos otra vez para arrepentimiento. El ejemplo para ellos es que había mucho cultivo y ninguna producción… está cerca de ser maldecido y su fin es ser quemado (v. 8).

Os animo a tomar en serio el mensaje de Hebreos 6:11-12, siguiendo lo que ustedes comienzan.

Es muy fácil comenzar algo, ¡pero se necesita mucho coraje para terminarlo! Al principio de algo nuevo, nos emocionamos y generalmente recibimos mucho apoyo para hacerlo. Pero cuando nuestras emociones se desgastan y todo lo que queda, es trabajo duro y la necesidad de una paciencia extrema, descubrimos lo que se necesita para realmente tener éxito. ¡Seamos personas que tengan mucho éxito y que terminen bien las cosas que hacen!

Te animo a tomar en serio el mensaje de Hebreos 6:11 y a seguir adelante con lo que comiences.

¡Es muy fácil empezar algo, pero se necesita mucho coraje para terminarlo! Cuando comenzamos algo nuevo, todos nos entusiasmamos y generalmente recibimos mucho apoyo para lograrlo. Sin embargo, cuando nuestras emociones se agotan y todo lo que queda es el trabajo duro y la necesidad de una paciencia extrema, descubrimos lo que se necesita para alcanzar verdaderamente el éxito. Sea una persona que realmente termina bien las cosas que hace.

Hebreos 9:22 Sin derramamiento de sangre no se hace remisión

• Eva fue seducida por satanás y por lo tanto su huevo femenino no pasa sobre el pecado. Adán tomó una decisión CONSCIENTE y comió el fruto prohibido, su semilla masculina pasa sobre el pecado. A través de la fusión del óvulo sin pecado con el esperma pecaminoso, se crea la vida pecaminosa y el hombre nace pecador.
• Jesús nació sin pecado de la Virgen María, sin tener relaciones sexuales con un hombre, su huevo sin pecado fue fertilizado por la semilla sin pecado del Espíritu Santo.
• Dios sacrificado un animal para hacer ropa (Génesis 3:21) para Adán y Eva, porque sin derramamiento de sangre no se hace remisión.
• Jesús tuvo que morir en la cruz. Cuando el soldado atrapado su lanza en el costado de Jesús, la sangre y el agua vinieron de Su lado. La prueba médica de que Jesús estaba realmente muerto. Su derramamiento de sangre trae el perdón de todo hombre que quiere creer.
• Como prueba de que Dios el Padre había aceptado el sacrificio del pecado de Su Hijo Jesús, Dios el Padre lo resucitó de entre los muertos después de tres días.
• Es hasta cada persona para elegir PERSONALMENTE, ya que Adán tomó una decisión voluntaria consciente a favor o en contra de Dios.
  Cada elección tiene sus propias consecuencias. La decisión de no creer significa una separación eterna de Dios.
• La elección de creer en el perdón del pecado a través de la sangre de Jesucristo significa la vida eterna con Dios.
• Hombre tiene una vida corta o larga en la tierra para tomar la decisión para Jesucristo. Toma la decisión correcta pronto porque no sabe cuánto dura su vida.

CLAMAR ES EL PODER DE INTERCESIÓN

La Biblia nos enseña que tenemos que entrar en el mundo espiritual con autoridad, por el nuevo y vivo camino que Jesús inauguró para nosotros (Hebreos 10:20).

Clama a mí, y te responderé, y te enseñaré cosas grandes y dificultosas que tú no sabes (Jer. 33:3).

La intercesión abre los Cielos sobre nuestras cabezas y trae una bendición en nuestra vida.

Dios tiene proyectos para niños que generan intimidad con Él.

Necesitamos orar por cosas grandes y significativas que sucedan en la historia.

SOMOS constructores de nuevas historias, y la intercesión es la herramienta principal para que estos milagros se manifiesten.

Necesitamos escribir una nueva historia, la historia de los campeones que no se dejan abrumados por la vida ni por satanás.

¡Somos hombres y mujeres que tenemos sus ojos en el trono, en lo Alto, por ayuda que nunca falla!

Alzaré mis ojos a los montes, de donde vendrá mi socorro 2 Mi socorro viene de parte del SEÑOR, que hizo los cielos y la tierra (Salmos 121:1-2).

¡LLAMA Y OBTENGAS RESPUESTAS! ¡Las realidades pueden cambiar cuando clamamos a Dios!

Y Jonás oró al Señor su Dios, desde las entrañas de los peces. En mi angustia lloré al Señor, y me respondió; Lloré desde el vientre del infierno, y oíste mi voz... Y mandó el SEÑOR al pez, y vomitó a Jonás en tierra seca (Jonás 2:1-10).

LA FE ES LA FUNDACIÓN FIRME - LA ESPERANZA es lo que establece OBJETIVOS
Pablo dice: Ahora la fe es ...
aunque la palabra FE no se usa como palabra en el tiempo presente, la usaremos de esta manera para impulsar nuestro razonamiento.

La fe como el firme fundamento de las cosas que se esperan, ES LA FE DE AHORA. La base firme de las cosas que se esperan ES SIEMPRE AHORA.

Puede decir esto de varias maneras.

1. Si la fe no es ahora, no es fe.
2. Si no es fe en el presente indicativo, no es el fundamento firme de las cosas esperadas.

LA ESPERANZA SIEMPRE ESTÁ AHÍ EN EL FUTURO.
Mucha gente pasa por alto este detalle, confundiendo la esperanza con la fe. Ellos dicen, "Bien, creo que Dios lo hará algún día."

1. PERO DIOS YA LO HIZO TODO lo que quería hacer con respecto a nuestra salvación y esperanza.
2. Él ya ha hecho todo lo que quería hacer en relación con nuestras finanzas.
3. Él ya hizo y hará todo lo que quisiera hacer con el diablo hasta el fin de los tiempos.

La promesa de Dios ya ha sido declarada.

1. La voluntad de Dios es Su palabra.
2. Su palabra debe ser su voluntad - El Nuevo Testamento es la última voluntad y testimonio de Jesús.
3. Jesús ya dijo "sí" a eso.
4. No es una cuestión de lo que hará algún día.
5. Se trata de que recibamos lo que ya ha hecho.

La ley universal de Dios con respecto a la oración.

Dios no hace más que en respuesta a la oración - John Wesley

En su enseñanza sobre la oración, Jesús comentó sobre la ley universal de Dios con respecto a la oración. Él dijo: "Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; tocad, y se os abrirá. Porque cualquiera que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que toca, se le abre" Mateo 7:7-8

Así como Dios tiene una ley universal de dar en Lucas 6:38, Su ley universal de oración se encuentra aquí en estos dos versículos: ¡TODO EL QUE PIDE EN LA FE RECIBE!

¡Esta ley que Dios ha establecido es irrevocable! Cuando venimos al Padre, debemos creer que vamos a recibir o es mejor no pedir.

A menudo, cuando la respuesta no llega inmediatamente, los cristianos están dispuestos a resignarse al hecho de que su oración no ha sido contestada con la suposición de que no es la voluntad de Dios. ¡La ley de Dios es que todos los que piden en la fe reciben! Debemos continuar perseverando en la fe, aceptando y creyendo su promesa hasta que recibamos lo que pedimos.

Nuestro Padre ES UN GALARDONADOR de aquellos que vienen a Él en fe. Él hará lo que Él ha prometido es mucho más allá de lo que podemos imaginar o pedir (Efesios 3:20).

Pero sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que a Dios se allega, crea que existe, y que es galardonador de los que le buscan (Hebreos 11:6).

• El tema de la fe es tan importante y nunca pasa.
• Sin fe es imposible complacer a Dios, es el único canal de comunicación con el Altísimo.
• Las bendiciones de Dios nunca llegan por compasión, sentimientos o sensaciones.
• Las bendiciones de Dios vienen sólo a través de la fe.
• Quien cree recibe, quien no cree no recibe.
• Y a fin de recibir las bendiciones de Dios diariamente, debemos CREER diariamente.
• Es absolutamente necesario aprender a ejercer la fe, a mantenerla afilada y fuerte.
• Es nuestro único medio de comunicación con Dios.
• La convicción segura de que Él recompensa a aquellos que le buscan.
• Recompensa en respuesta a las oraciones; recompensa con Su presencia; recompensa con Su Espíritu.
• Preste plena atención a la Palabra de Dios y a su relación con Jesús.
• Deje que Jesús y Su Palabra sean la base y el sustento de su pensamiento.
• Acercarse a Dios continuamente con una oración y fe inocentes.

La ley universal de Dios con respecto a la oración.

Dios no hace más que en respuesta a la oración - John Wesley

En su enseñanza sobre la oración, Jesús comentó sobre la ley universal de Dios con respecto a la oración. Él dijo: "Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; tocad, y se os abrirá. Porque cualquiera que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que toca, se le abre" Mateo 7:7-8

Así como Dios tiene una ley universal de dar en Lucas 6:38, Su ley universal de oración se encuentra aquí en estos dos versículos: ¡TODO EL QUE PIDE EN LA FE RECIBE!

¡Esta ley que Dios ha establecido es irrevocable! Cuando venimos al Padre, debemos creer que vamos a recibir o es mejor no pedir.

A menudo, cuando la respuesta no llega inmediatamente, los cristianos están dispuestos a resignarse al hecho de que su oración no ha sido contestada con la suposición de que no es la voluntad de Dios. ¡La ley de Dios es que todos los que piden en la fe reciben! Debemos continuar perseverando en la fe, aceptando y creyendo su promesa hasta que recibamos lo que pedimos.

Nuestro Padre ES UN GALARDONADOR de aquellos que vienen a Él en fe. Él hará lo que Él ha prometido es mucho más allá de lo que podemos imaginar o pedir (Efesios 3:20).

Por la fe, Abraham siendo llamado, oyó para salir al lugar que había de recibir por heredad; y salió sin saber a dónde iba (Hebreos 11:8).

Abraham demostró su fe por obediencia al salir de Ur y viajar a una tierra desconocida. No sabía a dónde iba; le bastó para saber que él estaba con Dios. No fue tanto a las promesas se inclinó, pero, en lo que había prometido. Él no estaba mirando las dificultades que tiene ante él, pero en la eterna, inmortal, invisible Rey. El único Dios sabio quien había asumido un compromiso para dirigir su camino. Nuestra guía no conoce el miedo y espera de nosotros, no tienen miedo porque Él está a nuestro lado.

John Bunyan escribió el libro PILGRIM anima la mazmorra. A pesar de sus limitaciones, su corazón y sus pensamientos no estaban atados. En una visión gloriosa, podía contemplar el camino del "cristiano", yendo de la "ciudad del pecado" a la "ciudad celestial". Una larga caminata, llena de peligros, tentaciones y desafíos. El gigante de la duda, en el castillo de la desesperación, el engaño, los llamamientos de la vanidad feria, la persecución del mal todo el tiempo, el martirio de los fieles, el compañero de viaje del cristiano, éstos eran algunos obstáculos vencidos por la fe. Y la Biblia dice que la fe es la certeza de cosas que son esperadas, la convicción de hechos que no son vistos (Hebr. 11:1). Es por la fe que conquistemos el mundo y, con este escudo, extinguimos los dardos del enemigo.

Mire delante y hacia arriba, sin tomar sus ojos de Jesús, nuestra vida y camino santo, porque esto es nuestro lema. ¡Permanezca seguro que, victorioso, alcanzaremos la ciudad divina, dónde el Señor nos espera! ¡Aleluya! ¡

Hebreos 12:6 nos dice que Dios nos disciplina porque Él nos ama. Esta verdad acerca de la corrección y disciplina de Dios de aquellos que Él ama es confirmada por Jesús mismo en Apocalipsis 3:19, cuando Él dice: "Yo reprendo y castigo a todos los que amo: sé pues celoso, y enmiéndate".

Arrepentirse y cambiar su actitud a menudo requiere corrección, pero las personas que no saben que son amados tienen dificultades para recibir corrección. La corrección no nos sirve si no podemos recibirla. Os animo a recibir la corrección del Señor en vuestra vida como signo de su amor por vosotros.

Las personas débiles son combativas. Las personas fuertes caminan en el amor y ayudan a los débiles.

Corrección y castigo no son evidencia de falta de amor, sino evidencia de amor.

Dios usa las pruebas como prueba de su fidelidad a Él. La disciplina y el juicio tienen un propósito educativo para prepararse para el futuro.

La disciplina apunta a su santificación. Su lugar como sacerdote real en el Cielo. Cualquiera que lo pase indiferente y estoicamente no aprenderá nada y perderá su lugar.

Pablo tenía una espina en la carne (2 Co. 12:7) para mantenerlo humilde.

Un verdadero hijo es alguien a quien el Padre encuentra el favor.

• Estos son los propósitos de nuestra vida: SANTIFICACIÓN Y VIDA ETERNA. Ambos son requisitos previos fundamentales para quienes desean ver a Dios. Sigue la paz con todos y la santificación Hb 12,14.
• El Señor desea que presentemos una vida totalmente dedicada a Él.
• ¡Dios hace maravillas al hombre que se santifica!
• ¡Dios hace maravillas al hombre que se santifica!
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• Santificación en su sentido literal significa "santificar". En consecuencia, el Espíritu Santo es el agente necesario de la santificación, y Cristo es la provisión adecuada.
• Mas vosotros sois de él en Jesucristo, el cual nos fue hecho por Dios sabiduría, justicia y santificación, redención (1 Corintios 1:30).
• No hay santificación, moralmente, en el sentido bíblico, sin contacto y unión con Cristo.
• Ser Santo es estar separado de el mundo y más cerca de Dios; ¡es caminar cada vez más en espíritu y cada vez menos según nuestra propia naturaleza!