O que é ansiedade e preocupaçaõ?

¿Qué es la ansiedad? o preocupación?

Es una preocupación y miedo intenso, excesivo y persistente ante situaciones cotidianas. Puede producirse frecuencia cardíaca elevada, respiración rápida, sudoración y sensación de cansancio. La ansiedad puede ser normal y es un indicador de una enfermedad subyacente sólo cuando los sentimientos se vuelven excesivos e interfieren con la vida cotidiana.

¿QUÉ DICE LA BIBLIA SOBRE LA ANSIEDAD?

San Mateo 6:25 Por tanto os digo: No os acongojéis por vuestra vida, qué habéis de comer, o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir: ¿no es la vida más que el alimento, y el cuerpo que el vestido?

Las raíces de la ansiedad son:

1. Materialismo (San Mateo 6:19,21) No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni polilla ni orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan: Porque donde estuviere vuestro tesoro, allí estará vuestro corazón.
2. Manipulación - Por tanto, no os angustiéis diciendo: ¿Qué comeremos, qué beberemos, o con qué nos vestiremos? - los que no conocen a Dios, buscan sólo las cosas materiales. Pero el Señor dice: Mas buscad primeramente el reino de Dios, y su justicia, y TODAS estas cosas os serán añadidas (Mt 6,33).
3. Indecisión: Nadie puede servir a dos señores; porque o aborrecerá a uno y amará al otro, o se dedicará a uno y despreciará al otro. No se puede servir a Dios y a Mammón.

¿CÓMO PODEMOS SUPERAR LA ANSIEDAD Y LAS PREOCUPACIONES?

Necesitamos APRENDER A CONFIAR en la palabra de Dios y no tener miedo de tomar medidas radicales. decisiones para agradar a Dios.
El Señor no quiere que estés ansioso.
¡Echa todas las ansiedades sobre Él ahora mismo a través de la oración y ELIGE CONFIAR EN DIOS!

Versículos de ansiedad en la Biblia

Salmos 34:4

Busqué al SEÑOR, y él me oyó; y me libró de todos mis temores.

Salmos 56:3

Cuando temo, confiaré en ti.

Salmos 94:19

En la multitud de mis pensamientos dentro de mí, tus consolaciones alegraban mi alma.

Salmos 121:1-2

Alzaré mis ojos a los montes, de donde vendrá mi socorro. Mi socorro viene de parte del SEÑOR, que hizo los cielos y la tierra.

Proverbios 12:25

El cuidado congojoso en el corazón del hombre, lo abate; mas la buena palabra lo alegra.

Isaías 41:10

No temas, que yo estoy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios, que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.

San Mateo 6:31-34

No os acongojéis pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o con qué nos cubriremos? Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que de todas estas cosas tenéis necesidad. Mas buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Así que, no os acongojéis por lo de mañana; que el mañana traerá su congoja: basta al día su aflicción.

San Mateo 11:28-30

Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, que yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

Filipenses 4:6-8

Por nada estéis afanosos; sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en todo con oración y ruego y acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros entendimientos en el Cristo Jesús. Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si alguna alabanza, en esto ejercitaos.

1 San Pedro 5:7

echando toda vuestra solicitud en él; porque él tiene cuidado de vosotros.