¿Qué es desempeño? ¿Habla la Biblia de dar cuenta de tus acciones a Dios?
Para cada acción hay una reacción. Este no es sólo un paradigma de Física, sino una ley bíblica (Gálatas 6:7) que acompaña todas nuestras acciones. Cualquiera que sea el tipo de acción que tomemos, tendrá repercusiones de alguna manera en nuestras vidas. Las actitudes humanas revelan el carácter y generan consecuencias, incluso si el resultado no es el más esperado.
La Biblia dice que:
- Por sus frutos se conoce el árbol ( Lucas 6 :44)
- Las malas acciones salen del corazón humano (Mateo 15:19)
- Tendremos que dar cuenta a Dios de lo que hacemos (Hebreos 4:13)
- Todos los pecados, ya sean grandes o pequeños, tienen consecuencias y castigos según su gravedad. Y la peor de estas consecuencias es la separación de Dios, la muerte eterna. En general, la Biblia nos dice que la paga del pecado es muerte, pero Dios ofrece gratuitamente vida eterna en Jesús (Romanos 6:23).
Las consecuencias de los errores son diferentes y algunas son bastante graves y pueden llevar a la muerte (1 Juan 5:16-17). Desde el principio, con la entrada del pecado en el mundo, el hombre se inclinó a pecar, obteniendo así el pago por su mala conducta. Abandonar a Dios, transgredir Sus Leyes y vivir a tu manera (intrascendente) son algunas de las peores decisiones del ser humano.
Por otro lado, las buenas actitudes pueden ser reflejo de un corazón regenerado por Dios. Cuando permitimos que el Señor gobierne nuestras vidas, Él transforma nuestro interior y en consecuencia nuestras actitudes comienzan a mejorar también. La Biblia dice que los hijos de Dios fueron hechos para buenas obras (Efesios 2:10), por eso con Jesús podemos rechazar la inclinación al mal y buscar hacer cosas buenas.
Reconoces que has hecho y haces mal ¿cosas? Soporta las consecuencias de lo que ya has hecho. Arrepiéntete y pide perdón a Dios. Él te ama y es fiel para perdonar (1 Juan 1:9). Nuestras malas actitudes son señal de un corazón manchado que necesita de Dios. Con la ayuda del Señor, buscando la guía de la Biblia, lograrás un corazón transformado y una mente renovada (Romanos 12:2), que te impulsarán a hacer la voluntad de Dios. Sólo así podrás actuar mejor y tener buenas consecuencias en la vida. Da este paso ahora mismo y busca tener actitudes nuevas y valiosas hacia Dios.